¿Será que gran parte de los esfuerzos realizados para mejorar la educación fracasan por el simple hecho que no guardan coherencia con lo que se predica en las aulas?, ¿Es posible educar para la vida sin dar ejemplo de ello?, ¿Serán las pequeñas acciones capaces de lograr grandes cambios?. Mas allá de las políticas de los gobiernos que al parecer responden a todo menos a los verdaderos intereses ciudadanos ¿Qué estamos haciendo como sociedad viva para cambiar el camino de incertidumbre que atraviesan nuestros sistemas educativos?, ¿Qué estamos haciendo día con día desde nuestra individualidad para fomentar el cambio?, y puede que lo más importante ¿Qué necesitamos para pasar de la reflexión a la acción?.
Para motivar estas reflexiones les compartimos algunos recursos audiovisuales que intentan demostrar como el poder de las pequeñas acciones pueden lograr grandes cambios.
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Hoy mas que nunca es muy necesarios que nuestros jóvenes internalizen
los valores fundamentales,como respeto ,tolerancia ,solidaridad,y luego convertirlo en virtudes a través de la práctica diaria.
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Me produce mucha satisfacción que haya profesionales de su nivel preocupados por los valores. A mi modo de entender, hemos dejado que la enseñanza se convierta en eso solamente, como decía un gran amigo y pedagogo francés, «vomitar»conocimientos y no EDUCAR. los valores no se predican, se viven o no se viven. desde que el docente ingresa al aula estä educando y transmitiendo valores. Y también los estudiantes,
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Gracias Elba, tus palabras son de gran aliento para todo el equipo del blog.
Saludos!
Gesvin R.
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Considero que todos los que nos dedicamos a la tarea de enseñar, debemos reconocer la intrínseca dificultad que entraña educar en valores; sin embargo es una misión absolutamente irrenunciable, porque una educación de calidad, no puede consistir sólo en la transmisión de saberes, sino que debe orientarse a la formación de personas capaces de afrontar los desafíos de la sociedad actual.
Además es muy importante para los niños, en su etapa escolar que viven cien la trasmisión y puesta en práctica de los valores, lo que contribuirá al logro de por ejemplo la libertad personal, autonomía, responsabilidad, solidaridad, tolerancia,igualdad, respeto, justicia entre otros.
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Gracias Margoth por compartir tus comentarios, estamos seguros que muchos nos hemos sentido invitados a reflexionar con ellos.
Saludos,
Gesvin R.
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Hay gran cantidad de casos en que predicar con el ejemplo no funciona: 1) Las madres (y a veces también los padres) se esfuerzan mucho en las tareas domésticas, teniendo el hogar limpio y ordenado, pero sus hijos no contribuyen en nada, prefieren salir con sus amigos o simplemente dedicarse a chatear, etc. 2) El profesor se preocupa por estar al día en su disciplina y ampliar su cultura general; sus estudiantes no. 3) Hay padres y docentes que son ejemplo de honradez, pero muchos de sus estudiantes plagian y roban. 4) Hay padres, madres y docentes muy laboriosos; sus hijos y alumnos, rara vez. ¿Hasta dónde sirven los buenos ejemplos?
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